En su nacimiento son comunidades no organizadas formalmente y que se crean con el propósito de compartir el conocimiento y de apoyarse mutuamente. Crecen y se desarrollan más allá de las políticas gubernamentales aportándole estabilidad y sostenibilidad al ecosistema.
Las comunidades pueden existir dentro o fuera de instituciones de todo tipo pero siempre manteniendo su autonomía.
Hoy, las comunidades son uno de los elementos más importantes para el desarrollo empresarial para conectar, aprender e impulsar acciones que agreguen valor a nuestro entorno.